¡Fue una gran fiesta!.
Un total de 250 arquitectos/as colegiados y sus acompañantes se dieron cita en el Castillo de Gorráiz para celebrar la fiesta de la patrona de los arquitectos » Nuestra señora de Belén».
Además de disfrutar de una agradable compañía el evento sirvió para reconocer a nuestros compañeros que han dedicado su vida a la arquitectura, con un homenaje a seis arquitectos que han cumplido 50 años de ejercicio en la profesión, así como a otros 40 que han alcanzado los 25 años en ejercicio. También por supuesto se dio la bienvenida a los 31 nuevos arquitectos colegiados.
En su discurso, el presidente del COAVN en Navarra, Santiago Iribarren, aprovechó la ocasión para lanzar una reflexión sobre el momento que atraviesa la profesión. Se hizo eco de un interesante artículo escrito por el ex decano de Cantabria Moises Castro en el que opina que «es necesario enfrentar el sistema actual de obligatoriedad en el que priman las imposiciones y las normativas con uno en el que prime la necesidad social de nuestra profesión».
Es hora de dejarse de lamentos, quejas y reivindicaciones y es esencial demostrar el valor social de nuestro trabajo. Más que obligatorios, debemos ser percibidos como necesarios y convenientes para la sociedad”, afirmó.
Por supuesto y aunque era un día de fiesta, no quiso dejar de lado en su discurso el momento de análisis, reflexión en el que encuentra el Colegio. Ya se ha explicado la situación en un comunicado pero «no debemos ni podemos eludir la responsabilidad de conocer la opinión de todo el colectivo para buscar la solución con más consenso. Las especies que no evolucionan y se adaptan al medio tienen un difícil futuro en una sociedad cambiante y exigente».
También insistió a todos los asistentes a que en este momento de encrucijadas y trabajo es imprescindible la participación, opinión y ayuda de todo el colectivo.
Es necesario que nuevos voluntarios, gente nueva y comprometida asuma las próximas vacantes de la Junta Directiva. «Debería ser una obligación moral de todo colegiado y colegiada».
Imágenes de todos los homenajeados en la galería
Era un momento de fiesta… y el Presidente de la delegación Navarra destacó la importancia de fortalecer los lazos dentro del colectivo: «Eventos como este son excepcionales en nuestro día a día y debemos fomentar más espacios de diálogo y colaboración entre colegas».
Hubo muchos momentos entrañables pero podemos destacar el homenaje a por sus 50 años en la profesión a José Francisco Bellido que recibió numerosas ovaciones y aplausos del público y por su parte el aviso de que volverá cuando cumpla 75 años en la profesión. También la anécdota de los gemelos y arquitectos Alberto y Fernando Oto que cumplían 25 años de ejercicio profesional.
En definitiva, una fiesta en la que no faltó de nada e imprescindible para la profesión, en la que se combinan el reconocimiento a la trayectoria de muchos de nuestros compañeros, la bienvenida a las nuevas generaciones y la reflexión sobre el futuro de la profesión y del Colegio.
